Aguascalientes, estado que se reinventa
Por: Gerardo Ochoa Sandy

El 24 de febrero de 1884 entró, humeante y oronda, la primera locomotora de vapor a la estación de la ciudad. Pronto adquirió notoriedad regional, lo que inclinó al Ferrocarril Central del país a enlazarla en 1890 con el Golfo de México y Tampico.

A raíz justamente del apogeo de esa estación, el minero Solomon Guggenheim —hoy famoso por sus museos— creó la Gran Fundición Central Mexicana en 1894, precedente de la industria metal-metalúrgica. Era la segunda reinvención del estado.

La ubicación geográfica, la estación y la fundición crearon las circunstancias para que iniciara la construcción de los Talleres Generales de Construcción de Máquinas y Material Rodante, concluidos en 1903. Aguascalientes se volvió una suerte de epicentro por el cual pasaba la industrialización hacia varias áreas de México. Era la tercera reinvención.

Siguieron, a lo largo de las décadas, las empresas familiares en varios sectores que alcanzaron relieve local y regional, el desarrollo urbano de la capital, la silenciosa y decidida apuesta por la educación superior y los centros de investigación, la Feria de San Marcos, la llegada del inegi: la definición de su propio perfil.

El gran caso de éxito del auge industrial, por supuesto, fue la llegada de Nissan; el inicio de actividades de su primera planta en 1982 disparó al sector, y su alianza de este 2017 con Daimler, bajo la denominación de Compas, consolida la industria. Jorge Vallejo, director de Relaciones Exteriores y Asuntos Gubernamentales para México, Latinoamérica y el Caribe de Nissan, relata la historia (véase la entrevista). Nissan constituye una cuarta reinvención.

A la par, al nivel de la gran industria local, destacan Herramientas de Corte, Hecort (orientada al mercado ferretero), JM Romo (equipos para el comercio, estantería industrial y muebles para el hogar) y Tecno Mec Agrícola (productos agrícolas e industriales).

Entre las Pymes locales exportadoras está Maindsteel, ocupada de la manufactura de productos metálicos para la industria automotriz y tubo estructural, entre otros rubros. En el área agroindustrial, Nutrialimentos Magaze, que exporta dulces típicos de guayaba. En la de accesorios deportivos, Rolin, dedicada a los artículos para jugar béisbol.

Pero la sociedad del conocimiento y de las nuevas tecnologías toca las puertas. En realidad, fueron abiertas desde tiempo atrás conforme fueron estableciéndose una serie de centros de investigación. Conacyt, por la variedad de sus centros de investigación asentados en Aguascalientes, será el detonador de la quinta reinvención. La política del Gobierno estatal, que preside Martín Orozco Sandoval, va en pos de una alianza fructífera, explica Alberto Adame Barrios, su secretario de Desarrollo Económico (véase la entrevista).

Entre otros centros destacan el Centro de Tecnología Avanzada (Ciateq); el Fondo de Información e Investigación para la Industria (Infotec); el Centro de Desarrollo e Investigación de Tecnologías de la Información (Cediti); el Centro de Investigación de Matemáticas (Cimat); el Centro de Investigaciones en Óptica (cio); el Centro de Investigación y Docencia Económicas (cide); el Centro de Investigación en Geografía y Geomática “Ing. Jorge L. Tamayo” (Centro Geo); el Centro Tecnológico de la Industria del Mueble de Aguascalientes (Cetima) y el Centro Tecnológico del Vestido (ctv). Este 2017 abren dos más: el Centro de Innovación y Transferencia de Tecnología Automotriz, Autopartes y Electrónica, y el Centro de Innovación y Trasferencia de Tecnología Agroindustrial.

Refirámonos a la Agenda de innovación de Aguascalientes: Documentos de trabajo (Conacyt, México, 2014), que da realce a ese nuevo horizonte. La áreas de especialización Electrónica y de Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC) merecen atención por sus fortalezas y oportunidades, que deben trascender sus debilidades y amenazas. El documento contextualiza las cosas. Una síntesis:

Parte importante de la inversión extranjera directa del estado llega a esa área, donde destacan Texas Instruments, Flextronics Manufacturing y Sensata Technologies. Existen igualmente empresas nacionales y un ecosistema Mipyme. La actividad se orienta a la fabricación de componentes y servicios de posproducción para las industrias del cine y el video, entre otros. El pib pasó de 1.96 mdp en 2008 a 2.4 mdp en 2012.

A nivel estructural, se cuenta con el Parque Tecnológico Tecnopolo Pocitos I y II y el Cluster Innovatia, que reúne empresas dedicadas al desarrollo de software. La relación con el sector automotriz, que tiene una demanda alta de electrónica, los avances en microelectromecánica y mecatrónica, más los altos niveles de seguridad y calidad de vida, que atraen ied y talento humano, perfilan un horizonte propicio.

Los claroscuros:

“La industria electrónica y TIC hidrocálida presenta dos realidades completamente polarizadas. Por un lado existen las grandes empresas transnacionales y nacionales de referencia con marcado carácter maquilador y con una escasa actividad de innovación dentro del estado. Por otro lado, se ha creado un ecosistema Mipyme que han optado por el desarrollo tecnológico y la innovación como elemento diferenciador, si bien se encuentra aún en las fases iniciales de actividad, con problemas para su despegue y financiamiento”, señala el documento.

Junto a lo anterior, hay una “desvinculación empresa-academia”, “escasa especialización de los recursos humanos y materiales frente a estándares internacionales” y “niveles medios de competitividad” ante otros estados cercanos. El nivel de internacionalización es asimismo bajo. México es el principal destino de las ventas, luego Estados Unidos y en menor medida América Latina y Asia. China e India tienen altos recursos humanos y de infraestructura. La amenaza del reshoring de actividades de valor por parte de transnacionales está latente.

El “ecosistema de innovación” para sobrepasar estas circunstancias pasa sin lugar a dudas por la “generación de conocimiento”, y la entidad cuenta con los recursos. Para el área electrónica y TIC, subraya el documento, destacarían la Universidad Autónoma de Aguascalientes, la Universidad Politécnica de Aguascalientes, el Campus Bonaterra de la Universidad Panamericana, el Tec de Monterrey, la Universidad Tecnológica de Aguascalientes, la Universidad del Valle de México, el Centro de Tecnología Avanzada y el Infotec.

De que es posible, es posible. Lo prueban el sector automotriz, las bases de educación superior e investigación, el ecosistema Mipyme, la apuesta del Gobierno estatal por el sector y por las empresas locales, la atmósfera de seguridad social, y el caso de innovación más exitoso, Snowbush: un centro de diseño electrónico local independiente que alcanzó relieve mundial, a tal grado que fue adquirido por la empresa multinacional Semtech.

Conacyt sugiere avanzar en la cadena de valor y concentrarse en algunos nichos de especialización y líneas de acción: desarrollo de la industria local (IED inteligente, mentores para innovación, capital de riesgo y consejo de sabios); diseño y desarrollo de sistemas embebidos; formación; vinculación; smart cities, y creación de un polo estatal de diseño electrónico.

Aguascalientes se reinventa otra vez.