La fragmentación productiva, uno de los rasgos más representativos de la actual globalización, ha dado paso a un arreglo productivo mediante el cual, empresas ubicadas en diferentes países actúan bajo la coordinación de una compañía líder, con el propósito de minimizar costos en cada una de las fases del proceso productivo. Son las llamadas cadenas globales de valor que comprenden desde el diseño hasta la distribución del producto.[1] En esta dinámica de producción global, los países en desarrollo (PED) tienen la oportunidad de incorporarse a una o varias fases del procesos productivos y, por esta vía, aumentar su presencia en el mercado internacional. Además de incursionar en nuevos mercados, los PED promueven su participación en las CGV con el propósito de diversificar su canasta exporta- dora, así como impulsar un proceso de aprendizaje acelerado mediante la transferencia de tecnologías y la difusión del conocimiento. [2]
Dado este escenario, diversos PED han instrumentado políticas públicas que buscan fortalecer los vínculos de su aparato productivo con los procesos internacionales de producción. En el caso de México han existido diversas iniciativas de este tipo; entre ellas, el programa de maquiladoras y el Programa de Importación Temporal para Producir Artículos de Exportación (PITEX); ambos se fusionaron en 2006 para dar paso al programa Industria Manufacturera, Maquiladora y Servicios de Exportación (INMEX). Aparte de estos programas de fomento, otra medida económica para afianzar la presencia de México en la economía mundial es el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), que entró en vigor en 1994 y ofrece acceso preferencial a los mercados de Estados Unidos y Canadá.
Dado que Estados Unidos es el principal destino de las exportaciones de la industria mexicana (alrededor de 80% del total desde 1990); es conveniente analizar si el citado acceso preferencial promueve la inserción de la industria mexicana en las CGV y, a su vez, caracterizar la modalidad de esta inserción mediante el origen del valor nacional incorporado a las exportaciones.
En este artículo se realiza una descomposición de las exportaciones brutas mediante una metodología basada en el análisis multirregional de insumo-producto. Para llevar a cabo la estimación y análisis, se propone utilizar como indicadores al comercio relacionado con las CVG (CR _CGV) y sus componentes: valor agregado doméstico (VAD _CGV) y valor agregado extranjero (VAE _CGV).
El principal aporte de este trabajo es la estimación y caracterización del CR _CGV contenido en las exportaciones brutas industriales de México hacia Estados Unidos, mediante el uso de matrices multirregionales de insumo-producto y la metodología más reciente disponible.[3]
METODOLOGÍA
El periodo de estudio de esta investigación comprende los años 1990, 1995, 2000, 2005, 2010 y 2015. La fuente principal de información estadística son las matrices insumo-producto multirregionales de la base EORA26; de las cuales, ocho sectores conforman la industria: alimentos y bebidas; textiles; madera y papel; petróleo, químicos y productos minerales no metálicos; productos metálicos; productos eléctricos y maquinaria, y equipo de transporte y otras manufacturas.
Partiendo de un modelo insumo-producto multirregional, se pueden descomponer las exportaciones brutas bilaterales por sector de acuerdo con la metodología de Zhi Wang, et al., y el concepto de comercio tradicional propuesto en Borin y Mancini [4] de la manera que se ilustra en la Figura 1.
El comercio tradicional se re ere al valor agregado doméstico que cruza la frontera de México a Estados Unidos y se consume finalmente en Estados Unidos sin ser reexportado por Estados Unidos a un tercer país, mientras que el CR_CGV se conforma por el valor agregado doméstico que cruza la frontera de México a Estados Unidos y es reexportado a terceros países (incluido México), y por el valor agregado extranjero contenido en las exportaciones mexicanas hacia Estados Unidos. El término doble contabilidad registra aquellas operaciones que cruzan las fronteras en múltiples ocasiones registrándose de manera repetida en las estadísticas comerciales brutas de México u otros países. En este estudio se opta por separar el término doble contabilidad del CR_CGV; no obstante, la magnitud de la doble contabilidad es indicador de la longitud de las cadenas en las que participa la industria mexicana de exportación hacia Estados Unidos (INMEUSA).
RESULTADOS
En el presente apartado se exponen y analizan los resultados que describen la inserción y posición de la industria mexicana de exportación en su relación con Estados Unidos. La evidencia muestra que el nivel de inserción de la INMEUSA en las CGV (representado por la participación del comercio relacionado con CGV) se incrementa entre 1990 y 2000, pero desciende a partir de 2005 hasta mostrar niveles similares en 2015 con respecto a 1990. La posible explicación al aumento mencionado es la entrada en vigor del TLCAN, mientras que el cambio de tendencia de 2005 está asociada a factores como: (1) el ingreso de China a la Organización Mundial del Comercio (OMC) a finales de 2001, que sustituyó algunas de las exportaciones industriales mexicanas hacia Estados Unidos por productos provenientes de China;[5] (2) la desaceleración de la economía estadounidense luego de los atentados terroristas del año 2001,[6] y las modificaciones realizada en Estados Unidos a las leyes que norman las salidas de inversión extranjera directa (ver figura 2).[7]
Fuente: Elaboración propia con base en datos de EORA26 (Lenzen, et al., 2013)
Al contrastar los citados hallazgos con los de estudios anteriores para la economía mexicana, se tiene que la INMEUSA presenta menores niveles de inserción que los calculados por Blyde para el periodo entre 2003 y 2007 y por Koopman, para 2004. Lo anterior puede indicar que el acceso preferencial a Estados Unidos no solo resulta insuficiente para aumentar los niveles de inserción de México en las CGV, sino que también muestra indicios de una inserción más exitosa de la industria mexicana de exportación que tiene como destino otros países.
La tabla 1 constata la capacidad de la INMEUSA para insertarse a CGV pertenecientes a sectores de tecnología alta y medio-alta. Entre 1990 y 2015 se ha mantenido un patrón donde los productos eléctricos y maquinaria, y el equipo de transporte son los sectores industriales que más han contribuido al CR _ CGV contenido en todas las exportaciones industriales de México hacia Estados Unidos. A pesar del éxito presentado por estos sectores en la inserción en las CGV, es conveniente analizar si lo hacen mediante una inserción hacia adelante (VAD exportado) –que incide más en el crecimiento– o hacia atrás (VAE exportado).
Desde 1990 se ha mantenido una tendencia donde la participación del VAD_CGV es menor a 10%, lo cual da indicios de la falta de capacidad de la INMEUSA para aumentar el valor agregado generado en México, lo que resulta en línea con lo encontrado por Blyde, [8] autor que documenta la existencia de bajos niveles y una caída en el valor agregado añadido por las empresas del programa IMMEX.
Los datos de las guras 2 y 3 muestran que mientras se reduce la inserción de la INMEUSA en las CGV, incrementa el VAD_CGV generado. El motivo de este comportamiento se debe a que terceros países que aprovechan el TLCAN como modo de acceso al mercado estadounidense han logrado aumentar su acceso directo (a partir del año 2000) a dicho mercado sin necesidad de la intermediación de México.
Fuente: Elaboración propia con base en datos de EORA26 (Lenzen, et al., 2013)
Fuente: Elaboración propia con base en datos de EORA26 (Lenzen, et al., 2013)
Fuente: Elaboración propia con base en datos de EORA26 (Lenzen, et al., 2013)
Las tablas 2 y 3 contienen el aporte de los sectores industriales al VAD y VAE relacionados con CGV contenidos en las exportaciones de la industria mexicana hacia Estados Unidos. El sector más importante, tanto en la generación de valor agregado en México (inserción hacia adelante) como en la incorporación de valor agregado extranjero (inserción hacia atrás), es el de productos eléctricos y maquinaria. El sector automotor (equipo de transporte), que es uno de los más importantes de la manufactura mexicana, tiene un nivel bajo de aporte al VAD_CGV, lo cual es un indicio del dominio de las actividades de ensamblaje en dicho sector. Otro dato por resaltar es el aporte significativo que realiza el sector de petróleo, químicos y productos minerales no metálicos al VAD_CGV, lo cual es una señal del alto nivel de inserción de los productos derivados del petróleo, químicos, caucho, productos de plástico y derivados de minerales no metálicos. No obstante, en el futuro es necesario realizar el análisis más profundo, ya que es posible que en este sector exista un comportamiento similar a los reportados para América del Sur, donde hay países que incorporan mucho valor agregado en sus exportaciones por medio de la explotación de recursos naturales.[9]
CONCLUSIONES Y RECOMENDACIONES
Este trabajo explora la inserción en las CGV de la industria mexicana de exportación que tiene como destino el mercado estadounidense. Para llevar a cabo el estudio, utiliza una metodología novedosa mediante la descomposición de las exportaciones brutas en una serie de elementos que permiten observar los patrones de la INMEUSA en un esquema de fragmentación internacional de la producción. Los resultados empíricos muestran un ascenso entre 1990 y 2000 en la participación del comercio relacionado con CGV contenido en las exportaciones brutas hacia Estados Unidos, comportamiento vinculado a la entrada en vigor del TLCAN. Entre 2000 y 2015, se revierte esta tendencia por diversos factores, entre ellos el desplazamiento de algunas exportaciones industriales mexicanas por parte de países como China en el mercado de Estados Unidos.
Fuente: Elaboración propia con base en datos de EORA26 (Lenzen, et al., 2013)
Asimismo, existen indicios de que el acceso preferencial de México en Estados Unidos resulta su ciente para aumentar la inserción de la inmeusa en las cgv, así como también hay señales que apuntan a una inserción más exitosa de la industria mexicana que tiene como destino países diferentes a Estados Unidos. Otro hallazgo de este trabajo ha sido la falta de capacidad de la inmeusa para aumentar el valor agregado relacionado con las cgv contenido en las exportaciones brutas.
En términos sectoriales, la inserción de la INMEUSA se ha dado principalmente en sectores de tecnología alta y medio alta, cuestión evidenciada por el alto aporte al CR_CGV registrado por los sectores automotor, productos eléctricos y maquinaria; este último, resulta determinante para la inserción de la IMEUSA en las CGV, constituyéndose como el mayor contribuyente en términos de valor añadido y valor incorporado extranjero en las exportaciones.
Para finalizar, se recomienda a los encargados de la política económica y comercial de México aprovechar la coyuntura actual de renegociación del TLCAN para buscar mejores mecanismos, no solo para lograr una mayor inserción en las CGV, sino para ir más allá de la industria ensambladora y escalar hacia estratos de mayor valor agregado en las cadenas, condición importante para aprovechar las ventajas potenciales que brindan las CGV a los países emergentes.
[1] Juan S. Blyde, Fábricas sincronizadas: América Latina y El Caribe en la era de las cadenas globales de valor, Banco Interamericano de Desarrollo, Washington, DC, 2014.
[2] bid.
[3] Zhi Wang, Shang-Jin Wei y Kunfu Zhu, “Quantifying International Production Sharing at the Bilateral and Sector Levels”, NBER Working Paper 19677, National Bureau of Economic Research, Cambridge, 2018.
[4] Alessandro Borin y Michele Mancini, “Follow the value added: bilateral gross exports accounting”, Working Paper Number 1026, Banca D’Italia, Roma, 2015.
[5] Alenka Guzmán y Alejandro Toledo, “Competitividad manufacturera en México y China en el mercado estadounidense”, Economía unam, vol. 2, núm. 4, México, 2005, pp, 94-137.
[6] Sergio Ordoñez, “La industria electrónica en México a veinte años del tlcan: encantos y desencantos”, en Arturo Oropeza, coord., tlcan 20 años. ¿Celebración, desencanto o replanteamiento?, Universidad Nacional Autónoma de México, México, 2014, pp. 205-236
[7] Teresa Gutiérrez-Haces, “La inversión extranjera directa en el tlcan”, Economía unam, vol. 1, núm. 3, México, 2004, pp, 30-52.
[8] Juan S. Blyde, Fábricas sincronizadas: América Latina y el Caribe en la era de las Cadenas Globales de Valor... op. cit.
[9] Ibid.