La fábrica evoluciona y se vale de la robótica, el internet de las cosas, la inteligencia artificial, el big data y otras tecnologías para enfilarse al futuro convertida en una red digitalizada que entrelaza, en tiempo real, todos los eslabones de la cadena de valor —desde el diseño hasta la postventa. La información que fluye a lo largo de la red es la savia que nutre la toma de decisiones para optimizar los procesos de producción y de distribución, ganar en eficiencia y orientar la búsqueda de nuevos productos y de áreas de negocios más dinámicas. Por su potencial, la digitalización de la industria es un tema prioritario en la agenda de las economías avanzadas, y debería serlo en la de aquellas que aspiran a ingresar a ese selecto bloque. En Alemania aparece entre los 10 “Proyectos de futuro” y, bajo la denominación de Industrie 4.0, pretende consolidar el liderazgo germano en el desarrollo, uso y exportación de tecnologías de producción digitalizada.
La Hannover Messe enmarca la génesis y desarrollo de la Industrie 4.0. Sus creadores, Henning Kagermann, Wolfgang Wahlster y Wolf-Dieter, presentaron el concepto en la edición 2011. Dos años más tarde, en 2013, se difundió en el recinto ferial lo que se considera su documento fundacional: Recommendations for Implementing the Strategic Initiative Industrie 4.0. En tanto que, en la edición de 2015, se lanzó la iniciativa Plataforma Industrie 4.0, bajo el auspicio de los ministerios federales de Economía e Investigación y el concurso de las asociaciones empresariales, académicas y sindicales más relevantes del país.
El cometido principal de la Plataforma es crear un entorno propio para la instrumentación y difusión acelerada del modelo de Industrie 4.0, para lo cual se crearon cinco grupos de trabajo: (1) Soluciones modelo, estandarización y normalización; (2) Investigación e innovación; (3) Seguridad de sistemas en red; (4) Marco legal, y (5) Trabajo, educación y formación continua. Las actividades involucradas en la Plataforma son numerosas, y en ocasiones convergen y se complementan con iniciativas de otros actores relevantes tanto del sector público como del privado. Las que se mencionan a continuación son botones de muestra, pero ofrecen una panorámica del alcance y profundidad de los esfuerzos comprometidos.
Industria 4.0 es, ante todo, una estrategia de cambio y adaptación. Un proceso que exige la transformación digital integral de las organizaciones como requisito para participar en la economía conectada y, eventualmente, prosperar en ella. Los beneficios de la digitalización industrial son altamente promisorios, la mayoría de los pronósticos apuntan a que las principales actividades productivas alemanas podrían generar un PIB adicional anual de entre 1.5% y 2.2% hasta 2025 (ver el Cuadro). En adelante y como resultado directo de la digitalización industrial, los países en desarrollo necesitarán nuevos modelos para impulsar su crecimiento, aumentar su productividad y enriquecer las capacidades de su factor humano. El modelo alemán Industrie 4.0 constituye una referencia obligada para reflexionar sobre el tema.